Hay alguien que nos vino a reemplazar

Versículo para hoy:

"¿Has visto hombre sabio en su propia opinión? Más esperanza hay del necio que de él" (Pr. 26:12)  (RVR 1960)

Lectura bíblica para hoy:

Números 3:38-51
Dedica ahora un tiempo para leer y meditar en este pasaje de la Biblia.

Reflexión:
Ahora meditemos en lo que hemos leído. (Si no has leído el pasaje vuelve al punto anterior).

Cuando comenzamos a leer este libro vimos que Dios se comunicó directamente con Moisés.

Vemos que el Tabernáculo de reunión era el lugar de la comunión, el punto de
encuentro, y el lugar donde el siervo de Dios recibía todas las indicaciones para dirigir al pueblo. (Nm. 1:1)

Toda persona que sirve a Dios necesita pasar tiempo a solas con Él para escuchar su voz y saber qué debe hacer antes de seguir avanzando.

Tengamos en cuenta que ya habían estado varios meses caminando por el desierto. El verso 1 dice que ya habían pasado 2 años desde que salieron de Egipto y todo era nuevo para ellos. Estaban en un camino desconocido avanzando como peregrinos hacia una tierra que nunca habían visto.

Para llegar bien y con seguridad debían escuchar y seguir al único que sabía y conocía el lugar hacia donde los quería llevar. Así es también para nosotros hoy.

A medida que vamos leyendo podemos decir que, para aquellos que salieron de la esclavitud, comenzó una nueva vida. Ahora todo gira en torno al Tabernáculo y el servicio al Señor.

Para entender lo que sigue debemos saber que los Hebreos habían estado durante 400 años sirviendo a los Egipcios. Ellos, al igual que todo verdadero cristiano, fueron rescatados solo por gracia, es decir por la mano poderosa de Dios, sin hacer otra cosa que creer.

Dios les mostró que debían sacrificar un cordero y marcar los dinteles de sus casas con la sangre para poder salvar la vida de los primogénitos.
Así también nos ha mostrado en este tiempo que Él entregó a su único Hijo para morir por nosotros en el madero. Ahora podemos decir que el precio de nuestro rescate fue pagado por la sangre del Cordero.

Volviendo al tema y pensando en el Faraón, vemos que por su dureza de corazón provocó la muerte de todos los primogénitos en la región. Hoy también hay gente que rechaza el mensaje de salvación por lo tanto, solo le espera la muerte y la condenación.

En ese mismo tiempo Dios habló a Moisés diciendo: "Conságrame todo primogénito. Cualquiera que abre matriz entre los hijos de Israel, así de los hombres como de los animales, mío es." (Ex. 13:1-2)  (RVR 1960)

¿Para qué? Bueno, en parte sería como un memorial, un recordatorio constante que la salvación de sus vidas vino por el sacrificio de los primogénitos. (Ex. 13:11-16)

Dios había dicho que todos los primogénitos del pueblo debían apartarse para Él, pero hoy vemos que los Levitas los van a reemplazar. Leemos que Moisés saca l                                                 a cuenta de todos los levitas y a partir de ese momento ellos se dedican al servicio exclusivo para Jehová. (Verso 41)

Todo esto me lleva a pensar en Cristo, "el primogénito entre muchos hermanos" (Ro. 8:29)  (RVR 1960) quien ocupó nuestro lugar y pagó el precio de nuestro rescate. Solo por Él tenemos libertad para acercarnos al Padre con toda confianza como dice el escritor a los Hebreos 10:19

Es maravilloso conocer esta verdad. Podemos decir con toda seguridad que Cristo es nuestro reemplazó, Él ocupó nuestro lugar para poder ofrecer a Dios un sacrificio excelente.

Germán E. Wursten Elmer.


Las citas bíblicas marcadas (RVR 1960) son de la Reina Valera © 1960. El texto Bíblico ha Sido Tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; Renovado © 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado Con permiso.