Translate

Leamos Hechos de los apóstoles en 61 días. (Día 47)

   

El Libro de los Hechos de los Apóstoles.

Día 47

Lectura Hechos Capítulo 21:33 al 22:9

Entonces, llegando el tribuno, le prendió y le mandó atar con dos cadenas, y preguntó quién era y qué había hecho.

Pero entre la multitud, unos gritaban una cosa, y otros otra; y como no podía entender nada de cierto a causa del alboroto, le mandó llevar a la fortaleza.

Al llegar a las gradas, aconteció que era llevado en peso por los soldados a causa de la violencia de la multitud; porque la muchedumbre del pueblo venía detrás, gritando: «¡Muera!»

Cuando comenzaron a meter a Pablo en la fortaleza, dijo al tribuno: 

“- ¿Se me permite decirte algo?” 

Y él dijo: 

“- ¿Sabes griego? ¿No eres tú aquel egipcio que levantó una sedición antes de estos días, y sacó al desierto los cuatro mil sicarios?”

Entonces dijo Pablo: 

“Yo de cierto soy hombre judío de Tarso, ciudadano de una ciudad no insignificante de Cilicia; pero te ruego que me permitas hablar al pueblo.”

Y cuando él se lo permitió, Pablo, estando en pie en las gradas, hizo señal con la mano al pueblo. Y hecho gran silencio, habló en lengua hebrea, diciendo:

“Varones hermanos y padres, oíd ahora mi defensa ante vosotros.”

Y al oír que les hablaba en lengua hebrea, guardaron más silencio. Y él les dijo:

“Yo de cierto soy judío, nacido en Tarso de Cilicia, pero criado en esta ciudad, instruido a los pies de Gamaliel, estrictamente conforme a la ley de nuestros padres, celoso de Dios, como hoy lo sois todos vosotros.

Perseguía yo este Camino hasta la muerte, prendiendo y entregando en cárceles a hombres y mujeres; como el sumo sacerdote también me es testigo, y todos los ancianos, de quienes también recibí cartas para los hermanos, y fui a Damasco para traer presos a Jerusalén también a los que estuviesen allí, para que fuesen castigados.

Pero aconteció que yendo yo, al llegar cerca de Damasco, como a mediodía, de repente me rodeó mucha luz del cielo; y caí al suelo, y oí una voz que me decía: 

“Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”

Yo entonces respondí: 

“¿Quién eres, Señor?” 

Y me dijo: 

“Yo soy Jesús de Nazaret, a quien tú persigues.”

Y los que estaban conmigo vieron a la verdad la luz, y se espantaron; pero no entendieron la voz del que hablaba conmigo.”

(Hechos de los Apóstoles 21:33 al 22:9)

Invitación 

Escucha aquí Hechos de los Apóstoles:

👉 Una versión dramatizada del libro Hechos de los Apóstoles 

Sigue el Blog de La Biblia La voz de Dios.

👉 Blog: La Biblia La Voz de Dios

AMAR LA BIBLIA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comparte tu comentario.