El peligro del engaño. ¿Cómo evitarlo?

Amar La Biblia

El proverbio para hoy:

"Atended el consejo, y sed sabios, y no lo menospreciéis." (Pr 8:33)

Lectura y reflexión:
Leemos 1 Juan 2:23-27

Luego de leer el pasaje de hoy, sumado a lo que vimos ayer, podemos entender la importancia de conocer la verdad y amar La Biblia.

En el versículo 21 Juan declara que no les escribe todo esto pensando que ellos no lo saben, por el contrario, él está convencido que los que estan leyendo su carta conocen estas cosas, pero es necesario recordarlas y afirmarlas.

En el contexto del pasaje encontramos una referencia a personas que
están en las congregaciones, asisten a las reuniones pero en la práctica no forman parte de la Iglesia.

En muchos casos se encuentran algunos que, aparentemente, han completado todos los requisitos y se los ha registrado como miembros, pero esto no garantiza que verdaderamente sean parte del cuerpo de Cristo.

Jesús dijo:

"¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo?" (Lc 6:46)

Pablo escribe una carta a Tito donde le recuerda que lo dejó en la Iglesia de Creta para que corrija lo que era deficiente, agregue lo que hace falta y quite aquello que no debe estar. (leer Tito 1)

Luego agrega que en este lugar se encontraban muchos que no obedecían la verdad ni enseñan claramente el evangelio. Por el contrario, dice que utilizaban artimañas para engañar y lo hacían buscando obtener dinero. 

Algunos insistían que para ser salvos había que practicar la circuncisión o guardar todos los mandamientos de la ley. 


Pablo le dice a Tito: 
"No les permitas enseñar".

Estos falsos seguidores de Cristo

"Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra." (Tit 1:16) (RVR 1960)  

Juan escribe su carta a las Iglesias para advertirles sobre las falsas enseñanzas que ya se estaban viendo en el primer siglo. 

El dice: "Os he escrito esto sobre los que os engañan." (1Jn 2:26) (RVR 1960) 

¿Cómo podemos evitar ser engañados? 
Debemos leer las Escrituras y pedir a Dios que nos de entendimiento.
El profeta Oseas escribe:

"Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos." (Os 4:6) (RVR 1960) 

Se presentó un gran problema en los tiempos de Jesús porque había líderes religiosos que quebrantaban la Palabra de Dios ajustándose a enseñanzas que venían por tradición y no por revelación. (Mt. 15:3) 

En fin, ¿cuál es la aplicación y el consejo para nosotros en el día de hoy?
Se resume en el versículo 24

"Lo que habéis oído desde el principio, permanezca en vosotros. Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre." (1Jn 2:24) (RVR 1960) 

Que Dios nos ayude a permanecer solo en Cristo y en Su Palabra de Verdad.

Germán E. Wursten Elmer


Las citas bíblicas marcadas (RVR 1960) son de la Reina Valera © 1960. El texto Bíblico ha Sido Tomado de la versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; Renovado © 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado Con permiso.