Seremos atacados

Semana 6
La Biblia en un año
Hoy leemos: Levítico 24:1 al 26:13

Memorizamos:
DEUTERONOMIO 4:39
"Aprende pues, hoy, y reflexiona en tu corazón que Jehová es Dios arriba en el cielo y abajo en la tierra, y no hay otro." (Dt. 4:39) (RVR 1960)

Hora Silenciosa:
Lectura Devocional:
Marcos 12:13-27

La limpieza que Jesús hizo en el Templo provocó el ataque y el rechazo por parte de los principales religiosos del aquel tiempo.

La limpieza que el Señor hace en nuestras vidas por medio de su Palabra también puede provocar lo mismo en aquellos que están endurecidos. Como vimos ayer, los que rechazan el evangelio puede ser que nos ataquen porque quieren seguir andando en la suciedad.

Los que están en tinieblas siempre tratan de apagar la luz. 
Les molesta que alguien venga y les hable de  Jesús

El versículo 12 termina diciendo que, después de escuchar la Parábola de la Viña, los líderes se fueron porque se sintieron tocados por el mensaje, sabían que los labradores malvados eran ellos.

El ataque hacia el siervo de Dios nunca termina.
Si bien ahora se van, no significa que se han rendido. Solo perdieron una batalla pero siguen en pie de guerra. Pronto regresarán con alianzas estratégicas. Utilizando nuevas artimañas van buscando eliminar al que consideran un enemigo.
Satanás actúa de la misma forma en contra del creyente.
Nunca se rinde. Puede dejarnos de molestar, pero tan solo por un tiempo. Te aseguro que volverá al ataque en cualquier momento. Nosotros debemos estar atentos porque el enemigo nunca nos deja, siempre está al asecho.
Él busca la manera de hacernos caer y perjudicar de esa manera nuestro testimonio.

El verso 13 dice que los sacerdotes y los ancianos enviaron algunos Fariseos, (estaban en contra de Roma) y algunos Herodianos (estaban a favor). Estos vienen con preguntas mal intencionadas para ver si podían sorprender al Maestro y señalar alguna falta.

Observa esta palabra: "Sorprender"
Esto es agarrar a alguien que está desprevenido. Quieren encontrar alguna falla en las doctrinas de Jesús.

La estrategia es enviar personas que aparentan genuino interes por seguir la verdad. Con lindas palabras de elogio encubren todo su odio.

Le dicen:
"... Maestro, sabemos que eres hombre veraz, y que no te cuidas de nadie; porque no miras la apariencia de los hombres, sino que con verdad enseñas el camino de Dios..." (Mr 12:14)(RVR 1960)

Jesús no se deja llevar por las palabras aduladoras. Conoce el corazón y sabe que estos vienen con una doble intención.

Cuidado, nunca te fíes de aquellos que vienen con palabras de elogio y con su mano palmean tu espalda, recuerda que pueden traer un puñal bajo la manga.

Esta es la pregunta que le hacen:
¿Está bien que paguemos los impuestos al imperio romano?

Si Jesús dice: "NO paguen los impuestos", estaría en contra del Imperio Romano y los herodianos tendrían como acusarlo delante de Herodes para que sea crucificado.
Si les dice: "Sí, deben pagar los impuestos", entonces los fariseos tendrían la escusa perfecta para criticar su doctrina delante del pueblo.

Jesús, con sabiduría del cielo les responde:
Ustedes deben darle al Cesar lo que corresponde al Cesar y deben darle a Dios lo que le corresponde a Dios.

En otras palabras: No le deban nada a nadie.

Finalmente se presentan los Saduceos y Jesús también les responde sabiamente. Les hace ver que están muy equivocados porque  ignoran las Escrituras y el poder de Dios. (vs. 24)

De esta manera, con mucha calma y sin entrar a discutir, el Señor dejó maravillados a los que trataban de perjudicarlo.

Oremos para que Dios nos ayude y nos de sabiduría para enfrentar a los enemigos y que tengamos suficiente conocimiento de su Palabra para que nadie nos confunda con sus mentiras.

Germán E. Wursten Elmer